amor falso, entre otras cosas

Siempre me has llamado loco, delirante y celoso, pero al mismo tiempo me llamas tuyo.

Finjo creer las palabras que dices para quedarme arropado en tus brazos.

Sin embargo, es interesante, creo que crees en esas palabras más que en las últimas.

Tus palabras a veces se parecen a un amor dulce y delicado, pero puedo ver que es un arte falso colgado en la pared.

Clavaste las pinturas por toda la galería y firmaste con tu nombre en la esquina, pero el arte que estás presentando no te pertenece.

son impresiones, copias y delirios propios.

Continúas pintando, dibujando y dibujando todo el arte que puedas darme para convencerte de que estás realmente enamorado.

Finges que soy tu musa, pero el lienzo ya no se parece a mí. son autorretratos en blanco y negro repetidos una y otra vez sobre lienzos ensangrentados.

Me llamaste todas estas cosas y finges que soy lo suficientemente hermosa como para recrearla, pero cada vez que tu pincel toca la cubierta blanca, tus ojos parecen no ser los míos.

Puedes llamarme todos los nombres que se te ocurran y decirme que me amas todas las noches.

Pero te prometo que lo único que puedes crear son piezas falsificadas egocéntricas.

Así que dime, dulce muchacho, ¿la musa es la chica sentada a tu lado o el reflejo en el espejo?